BENEFICIO 1: Mejora de la circulación. El yoga hace que la sangre fluya y se transporte más oxígeno a las células. Las posturas de torsiones están pensadas para “escurrir” la sangre venosa de los órganos internos y permitir que la sangre oxigenada fluya hacia ellos cuando se suelta la postura. Esto ayuda a disminuir la incidencia de los ataques de corazón y los infartos, ya que los coágulos son muchas veces los causantes de los mismos.
BENEFICIO 2: Descenso del nivel de cortisol. El yoga desciende el nivel de cortisol. Si los niveles de cortisol permanecen altos incluso después de que la crisis haya pasado, pueden comprometer el sistema inmunológico. Altos niveles de cortisol de forma crónica debilitan la memoria y pueden producir cambios permanentes en el cerebro. Adicionalmente los niveles de cortisol alto están relacionados con la depresión, la osteoporosis, la presión arterial alta y la resistencia a la insulina.
BENEFICIO 3: Se feliz. Un estudio reveló que una consistente práctica de yoga mejora los estados depresivos y produce un significativo aumento del nivel de serotonina y una disminución de los niveles de monoamina oxidasa (enzima que anula los neurotransmisores) y cortisol. En la Universidad de Wisconsin, Richard Davidson, descubrió que la corteza prefrontal izquierda aumentaba su actividad en los meditadores, un encuentro que ha sido correlacionado con unos niveles de felicidad más altos y una mejor función del sistema inmunológico.
BENEFICIO 4: Bajos índices de enemigos. El yoga reduce el nivel de azúcar en la sangre y el LDL (colesterol “malo”), y aumenta los niveles de HDL (colesterol “bueno”). Se ha descubierto que, en las personas con diabetes que practican yoga, el nivel de azúcar desciende, reduciendo el cortisol y la adrenalina, estimulando la pérdida de peso y mejorando la sensibilidad a los efectos de la insulina. Si descienden los niveles de azúcar, disminuirá el riesgo de complicaciones como el ataque al corazón, los fallos renales y la ceguera.
BENEFICIO 5: Rejuvenece. Brinda mayor flexibilidad en las articulaciones, elonga los músculos, mejora la flexibilidad general del cuerpo y es un workout completo para todos los grupos musculares. Ayuda a mantenerse joven y vital. En su lucha contra el deterioro que llega con el envejecimiento natural, el gurú antiage Dr. Andrew Weill recomienda esta práctica y asegura que en las mujeres mayores también mejora la estabilidad y el balance previniendo las caídas tan comunes a esa edad, asociadas con la osteoporosis, ya que el peso se distribuye mejor y ambos pies lo soportan por igual.
BENEFICIO 6: Provee una mejor concentración. Un importante componente del yoga es el de que uno se focaliza en el presente. Diversos estudios han concluido que la práctica regular mejora la coordinación, el tiempo de reacción, la memoria e incluso los niveles de coeficiente intelectual. Las personas que acompañan las posturas físicas con la meditación demuestran una mayor habilidad para resolver problemas y recordar información. El silencio interior que se obtiene con la meditación calla los pensamientos perturbadores y estresantes, lo que es muy saludable.
BENEFICIO 7: Aporta belleza. Aumenta la belleza al mejorar la figura y la postura. El yogui Swami Sivananda, un maestro oriental de esta disciplina, asegura que practicando regularmente ciertas asanas, las mujeres y los hombres adquieren una figura de mayor belleza y elegancia y que sus practicantes ganan una luminosidad en la cara y en los ojos y un peculiar encanto en su sonrisa. La elongación promueve además la alineación de la espina dorsal, otorgando una mejor postura y gracia al caminar. Algunas asanas regulan las hormonas e incentivan la vida sexual. “No se trata de estar más guapa, sino más sana. Y es entonces cuando surge la belleza”, asegura Veronica Bloom, yogui, blogguer y modelo española.
BENEFICIO 8: Ayuda a regular la presión arterial. Las personas con presión alta se pueden beneficiar con la práctica del yoga. La postura de relajación profunda promueve una baja tanto en la presión sistólica como diastólica. Las posturas y los ejercicios respiratorios mejoran las condiciones cardiovasculares. La práctica regular aumenta la fortaleza del corazón e incrementa el suministro de oxígeno mientras se practica. Es sabido que el yoga ayuda a transportar más oxigeno a las células.
BENEFICIO 9: Combate el insomnio. Esta práctica actúa beneficiosamente sobre el sistema nervioso y en especial el cerebro, y eso termina mejorando la calidad del sueño. Investigadores de la universidad de Harvard encontraron que la practica de yoga a diario durante ocho semanas mejora de manera significante la calidad de sueño en personas con insomnio. Está demostrado que las asanas y los ejercicios respiratorios hacen que se necesiten menos horas de sueño para estar descansado ya que el Yoga ayuda a eliminar las toxinas del cuerpo.
BENEFICIO 10: Alivia dolores. No solo se ha demostrado que esta práctica es una terapia efectiva para reducir el dolor crónico, especialmente de la espalda. Las posturas, técnicas respiratorias y meditación (o una combinación de las tres) reducen el dolor en personas con artritis, dolor de espalda, fibromialgia, síndrome del túnel carpiano y otras dolencias crónicas.
El yoga también alivia otros dolores crónicos como los premenstruales. Hay varias posturas de yoga que favorecen la elasticidad y tonificación del útero, aliviando la congestión de sangre del abdomen. El relax que aporta lleva también a combatir los efectos depresivos y el mal humor que anticipan la llegada del período menstrual en la mayoría de las mujeres.
BENEFICIO 11: Buena para el corazón. No solo los problemas genéticos o la mala alimentación forman placas en las arterias coronarias. Se ha descubierto que el estrés emocional crónico colabora en la formación de estas placas bloqueando estas arterias y reduciendo el volumen de sangre que llega al corazón. El yoga es el método antiestrés más eficaz jamás inventado. Mediante las diferentes posturas hace que la sangre fluya y también la adelgaza, ayudando a disminuir la incidencia de los infartos al evitar los coágulos.
BENEFICIO 12: Mejora la inmunidad. Un reciente estudio noruego encontró que la practica de yoga cambia la expresión de los genes que mejoran la inmunidad a nivel celular. El yoga también ayuda a mejorar la inmunidad al incrementar la salud general. Mientras respiras mejor, te mueves mejor y tu sangre circula mejor, haciendo que todos tus órganos funcionan mejor.
BENEFICIO 13: Adiós migrañas. Investigaciones demuestran que las personas que sufren vde migrañas tienen menos migrañas y menos dolorosas luego de tres meses de practicar yoga.
BENEFICIO 14: Mejora el performance sexual. Estudios encontraron que 12 semanas de yoga pueden mejorar el deseo sexual, la excitación, el performance, la confianza, el orgasmo y la satisfacción sexual en hombres y mujeres. Físicamente el yoga incrementa el flujo sanguíneo al área genital, lo que es importante para la excitación y las erecciones, además que fortalece el “moola bandha” o músculos del piso pélvico. Mentalmente, la respiración y control mental involucrado en la practica ayuda mejorar el rendimiento y la calidad del acto sexual.
BENEFICIO 15: Articulaciones sanas. Cada vez que se practica yoga, se llevan las articulaciones a una gama completa de movimientos. Esto puede ayudar a prevenir la artritis degenerativa y a mitigar esa dolencia.
BENEFICIO 16: Mejora la masa ósea. Está muy bien documentado que los ejercicios en los que se realiza carga de peso fortalecen los huesos y previenen (e incluso eliminan) la osteoporosis. En un estudio de la Universidad de California se mostraba que la práctica del yoga intensificaba la densidad de los huesos vertebrales. La capacidad del yoga para bajar los niveles de la hormona del estrés, el cortisol, puede ayudar a conservar el calcio de los huesos.
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